miércoles, 10 de febrero de 2010

reasons


No puedo dormir, y ya no cuento ovejitas,
porque crecimos sin querer, y ya no somos niños;
cuento kilómetros, los que nos separan;
mil sesenta y nueve, cada uno como una patada,
más de mil motivos por los que no siento en mí tus manos,
no puedo besarte, ni tocarte, no puedo olerte ni morderte el cuello,
pero mientras, puedo recordarte, puedo esperar,
ya no representa demasiado problema,
por ti esperaría una vida, otra más;
a ti te dejo marchar, porque te quiero de verdad,
es puro amor,
con eso no pueden un puñao de kilómetros,
ni casi nada que se nos ponga por medio;
yo no me canso, y los años nos dan la razón,
la misma que casi pierdo cuando te miro.

Distancia no es cuando nos separemos,
distancia es si no volvemos.