de cercanía

El tiempo pasa y ya estoy a nueve días de irme por fin de aquí, de estar allí, y los nervios empiezan a hacer de las suyas... si lo pienso me aprieta algo en el pecho y tengo que respirar profundamente... Recuerdo la primera vez que fuí, vomitando como una loca, tan nerviosa... y ahora, tres años después es casi lo mismo, -solo que sin vomitar-, pero mucho más intenso aún... son ya tantas cosas, llevamos tanto a la espalda... Pero al mismo nivel que de nervios estoy llenita de ilusiones, de planes, de amor por dar... y por recibir.
Y para colmo este invierno es diferente, él y yo estamos de otra manera... y aunque nos hayamos complicado la vida me muero por estar en esa cama enterrados en mantas, olvidándonos del mundo mientras fuera se congela todo...
Naturaleza, gente maravillosa y animales, animales por todas partes. ¿Qué más podría pedir? Nada, nada puede hacerme más feliz.

de no 23

Ya es 27, ya es tu cumpleaños, el segundo que no vas a cumplir.
Por más que pase el tiempo no entiendo nada, en el fondo sigo cabreada. En qué cabeza cabe algo tan terrible.
Aún recuerdo el primer día que te ví, me dejaste loca, y las miradas serias en clase... y la primera vez que quedamos en aquel banco de madera de ese parque cochambroso... hablamos, fumamos y bebimos litros durante horas, nos dimos cuenta de cómo nos parecíamos, supimos que íbamos a estar siempre ahí el uno para el otro y nos hicimos bastante inseparables. Y debe ser verdad, porque aun despues de todo sigues aquí, jamás serás pasado, porque eres presente, estás presente...
Te imagino ahora con los 23, ya hecho un hombre, habiendo echao cabeza, más guapo que nunca... y me desmorono.
Me aferro a tus recuerdos, a tus fotos y a tu pañuelo como me habría aferrado a tu vida si hubiera podido evitar que te fueras de esa manera asquerosa, lo que no sé es dónde coño estaba entonces, me siento tan culpable, me matan los latidos y no puedo dejar de pensar que estabas solo. Docenas de veces hablamos de cosas así, sin imaginar este final. Ojalá pudiéramos volver atrás, entonces ya no jugaríamos con fuego y ahora no estaría todo calcinado.

de parrismo total

Vivo en la más absoluta puta parra. A veces es un canteo mu grande y me sorprendo de mi propio empane.
Y es que da igual que fume o no, si a veces es incluso peor que vaya a pelo, pero creo que es una parte de mi forma de ser. Nunca he sío el lince más rápido, no... Y no sé, supongo que tendremos que existir las personas así, que tendrá que haber de tó. Cosas absurdas como que a veces me olvido de ponerme bragas, y luego no recuerdo si me las puse o si es que me las puse y las he perdido... y pienso... ¿lo habré soñao? ¿habré soñao que me ponía bragas pero luego en la vida real no lo hice? Y es una paranoia, porque a veces no aparecen y pienso vale, no llevaba... y a veces sí aparecen, un día me mandan un mensaje o me llaman para hablar sobre un hallazgo: mis bragas. Y me descojono y pienso: ¡llevaba y las perdí!. Pero luego a veces soy mu espabilá. Ahora por ejemplo me acabo de acordar de un trocino de chocolate negro que guardé el otro día por aquí en una servilleta para un caso extremo de hipoglucemia o algo. Lo he buscao, lo he encontrao y aquí que me lo estoy comiendo. Tan ricamente. No sé, es que la vida es más compleja de lo que parece, y se me ocurre fumar yerba asesina de esta que coloca en plan triposo-tropical o algo y me pongo a pensar en tantas chorradas que me pierdo divagando en mí misma... es un no parar en mi cabeza, vaya. Y encima a to le meto mano, que lo mismo me da por comerme la olla con el hambre en el mundo y sobre que necesitamos retroceder para avanzar que por rayarme por cómo crían los mejillones o por la gestación de un tapir, no sé, qué cacaos mentales me monto, a veces creo que me empacho mentalmente.

de liarla

Tirada a más no poder en mi cama pensando en cómo la lío. Con una fumaera del 15 me ha dao por pensar y la conclusión a la que llego es esa, cómo la lío.

de elaborar

Me encanta que existan formas simples y a la vez tan complejas de sacar un sonrisa sincera desde tan lejos...
"Tus dedos diríanse que son fragmentos extraídos de un árbol en blanco sobre el que sonreír... el silencio se cubre con un sueño... con el que tú quieras."

"Y poderle decir que he pasado la vida sin saber que le espero, no..."

de carreteras

Es curioso como puede que en un momento estés muerta de calor asqueada en tu habitación buscando serie para ver, y que tu colega, que vive en otro pueblo, te envíe un mensaje diciendo que te prepares porque en media hora se llega a por tí. ¿Qué dices, loco? ¡Genial, pero dame tres cuartos, que tengo que sacar a la perra y ducharme!
Y en cinco segundos todo cambia, sorpresa, realmente es así de sencillo. Desde siempre nuestro fuerte ha sido la improvisación. Y así como de repente acabas toda feliz en el Torcal acurrucada en una piedra en la quinta caraja, entre grillos, risas, brisa fresca, porros, conversaciones, estrellas normales y fugaces, silencios, besos, abrazos y arrumacos... Y muchas tonterías, y mucha tranquilidad, y música, y fotos, y muchas vueltas absurdas por caminos que creíamos que llevaban a otro sitio y resulta que no...
Siempre se me olvida lo que me gusta hasta que vuelve a pasar, pero me encanta que después de follar me apriete super fuerte y me cruja toda la espalda... me deja definitivamente como una gominola.

de aceptación

No sé de qué me extraño si lo primero -y lo último- que me enseñaste es que no hay nadie imprescindible. Nadie.

de fondo

Demasiadas cosas que cambiar para no saber cómo coño hacerlo.
Demasiadas cosas por decir que no sé como sacar. Demasiado miedo, a todo. Necesito un plan, necesito dejar de ser un flan. Este puto pueblo y esta casa me entristecen hasta llegar a un bloqueo absoluto.