de esperanza

Puede que mi vida esté otra vez (o debería decir todavía) entera patas arriba, pero saber que en cuatro días vuelvo a AMUS me calma, como siempre. Desde que conocí el centro, su labor y su gente se ha convertido en la motivación más grande que tengo en mi vida, y saber que tengo problemas, que tienen problemas y que estando juntos lo llevamos mejor es genial, es una perfecta simbiosis, todos ganamos, nadie pierde. Cada vez somos menos, y hay más trabajo, cada vez es más difícil, por eso hay que ponerle más empeño si cabe. Y mientras salimos o no hacia adelante seguiremos compartiendo nuestros sueños, nuestras ilusiones, nuestras ideas, nuestras metas, nuestro trabajo, nuestra comida, nuestros miedos... nuestras vidas.

Me gusta la idea de pensar que empieza el frío y dormiremos la siestina arrebujaos con mantas en el sofá.

"Hay magia cuando sigues luchando más allá de tu resistencia, la magia de darlo todo por un sueño que nadie más ve aparte de ti."