de contradicciones

Hoy ha sido un día raro, muy raro.
Pero por fin me ha venido la regla, y saber que no estoy preñada ha sido una liberación... ya me veía con un bombo del carajo... o más bien en la clínica abortando, para qué mentir...
Y el mensaje de por la noche... inesperado y desconcertante. Puedo notar su miedo, -aunque no sé bien a qué-, sigue diciendo una cosa y luego haciendo otra, como cuando decidimos dormir en camas separadas y se mete de madrugada en la mía, me abraza y tiembla, haciéndome temblar a mí también... o como cuando follamos y me dice que "no puede ser"... y a mí me da la risa y le digo "¿que no puede ser? pues yo diría que está siendo...".
Sus maneras me traen loca, nunca sé por dónde coño va a salir, pero creo que en realidad es lo que me gusta, lo que espero. Aunque no quiera no puedo evitar soltar una sonrisa -tonta- al ver su nombre en la puta pantallita de mi móvil. La verdad es que quisiera que esto durara. Que durara y que merezca la pena.

"Tu entrega silbó en mi oído mucho viento acumulado..."