miércoles, 22 de agosto de 2012

de parrismo total

Vivo en la más absoluta puta parra. A veces es un canteo mu grande y me sorprendo de mi propio empane.
Y es que da igual que fume o no, si a veces es incluso peor que vaya a pelo, pero creo que es una parte de mi forma de ser. Nunca he sío el lince más rápido, no... Y no sé, supongo que tendremos que existir las personas así, que tendrá que haber de tó. Cosas absurdas como que a veces me olvido de ponerme bragas, y luego no recuerdo si me las puse o si es que me las puse y las he perdido... y pienso... ¿lo habré soñao? ¿habré soñao que me ponía bragas pero luego en la vida real no lo hice? Y es una paranoia, porque a veces no aparecen y pienso vale, no llevaba... y a veces sí aparecen, un día me mandan un mensaje o me llaman para hablar sobre un hallazgo: mis bragas. Y me descojono y pienso: ¡llevaba y las perdí!. Pero luego a veces soy mu espabilá. Ahora por ejemplo me acabo de acordar de un trocino de chocolate negro que guardé el otro día por aquí en una servilleta para un caso extremo de hipoglucemia o algo. Lo he buscao, lo he encontrao y aquí que me lo estoy comiendo. Tan ricamente. No sé, es que la vida es más compleja de lo que parece, y se me ocurre fumar yerba asesina de esta que coloca en plan triposo-tropical o algo y me pongo a pensar en tantas chorradas que me pierdo divagando en mí misma... es un no parar en mi cabeza, vaya. Y encima a to le meto mano, que lo mismo me da por comerme la olla con el hambre en el mundo y sobre que necesitamos retroceder para avanzar que por rayarme por cómo crían los mejillones o por la gestación de un tapir, no sé, qué cacaos mentales me monto, a veces creo que me empacho mentalmente.

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